La Fiscalía de Chihuahua localizó a los hermanos Berrelleza Rábago, quienes habían sido vistos por última vez el 20 de junio en la comunidad de Cerocahui, municipio de Urique, fecha en que el capo de la zona, apodado “El Chueco”, asesinó a dos padres jesuitas.
Jesús Armando fue encontrado con vida. En otra acción se localizó el cuerpo de Paul Osvaldo, que fue enterrado en un punto del Cerro Colorado, ejido de Cerocahui.
Los hechos fueron comunicados por el comandante de la 42 Zona Militar, Alfredo Salgado Vargas y el fiscal estatal, Roberto Javier Fierro Duarte, al término de una búsqueda por tierra y aire en la zona.
“Tras varios días de búsqueda y en un esfuerzo conjunto, ubicamos en buen estado de salud al joven Jesús Armando, en un punto de la región serrana de la entidad”, informó Salgado Vargas.
El fiscal de Chihuahua, Roberto Fierro Duarte, señaló que Jesús Armando fue integrado al programa de protección a testigos protegidos y se encuentra bajo resguardo de la Fiscalía Estatal.
Información aportada por un testigo colaborador y dentro de los trabajos de inteligencia, se ubicó en la zona serrana el punto en donde los responsables ocultaron el cuerpo sin vida de Paul Osvaldo.
Personal técnico pericial llevó a cabo la exhumación del joven de 22 años en el Cerro Colorado, ejido de Cerocahui, el cual fue trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense para la práctica de los dictámenes periciales correspondientes.
El 22 de junio pasado, Fierro Duarte explicó que José Noriel Portillo, alias “El Chueco”, participó en dos actos violentos contra la población civil de Urique el 20 de junio.
El primero fue la mañana de aquel lunes, cuando el presunto criminal arribó a un domicilio para localizar a Paul B., por una rencilla generada durante un juego de béisbol.
El fiscal explicó que el domingo se realizó un juego de béisbol en el que perdió el equipo patrocinado por el criminal, lo que generó el reclamo y la disputa. “El Chueco” disparó contra Paul y secuestró a su hermano, Armando.
El segundo acto fue más tarde ese lunes, cuando Pedro Palma, guía de turistas, interactuó con “El Chueco” y posteriormente fue secuestrado. El civil logró escapar y llegó golpeado al templo del pueblo, donde fue auxiliado por los sacerdotes Javier Campos y Joaquín Mora.
“El Chueco” llegó al lugar y asesinó al guía de turistas y a los dos jesuitas; también ordenó llevarse los cuerpos.
El fiscal Fierro Duarte informó que los cuerpos fueron localizados en el paraje de ‘Pito Real’, en la carretera de San Rafael a Creel.
Se aclaró que no había denuncias ni información sobre secuestro de turistas.
Agradeció al Ejército, Guardia Nacional, Secretaría de Seguridad Pública federal y estatal por el trabajo realizado en la zona.
Se aclaró que no había denuncias ni información sobre secuestro de turistas.
Agradeció al Ejército, Guardia Nacional, Secretaría de Seguridad Pública federal y estatal por el trabajo realizado en la zona.