Shani Louk, la joven alemana que se creía secuestrada y asesinada, que pasearon por las calles los terroristas de de Hamás, podría estar con vida y en un hospital de Gaza.
Muchos la habían dado por muerta, y razones no faltaban: los guerrilleros de Hamás secuestraron a la joven alemana Shani Louk en el festival de música por la paz ‘Supernova’ de Re’im, en Israel, y la humillaron pocas horas después en las calles de Gaza mostrándola en la parte trasera de un ‘pick up’ boca abajo, semidesnuda y con las piernas aparentemente rotas. Sin embargo, su madre no perdió nunca la esperanza de que estuviese inconsciente, pero con vida. Y, ahora, asegura que es así.
En un vídeo que ha enviado a medios alemanes como Bild y la cadena ARD, Ricarda Louk afirma que ha recibido confirmación de que su hija está ingresada en un hospital en territorio palestino, aunque no revela la fuente de su información. Aparentemente, con su tarjeta se hizo también un pago cerca de un hospital. «Shani está viva, pero sufre una grave lesión en la cabeza y se encuentra en estado crítico», afirma la progenitora, que lanza un desesperado llamamiento para que las autoridades se centren en lograr su evacuación. «Exigimos al gobierno alemán que actúe rápido para rescatarla y que no discuta sobre jurisdicciones. Cada minuto que pasa es vital», apostilla.
La abducción de Louk ha sido una de las más espeluznantes -se estima que hay 130 rehenes en manos de Hamás- y de las que más ha impactado tanto entre la población israelí como en el resto del mundo. La crueldad que demuestra el vídeo, en el que incluso un niño escupe sobre el cuerpo de la joven, ha sido condenada incluso por quienes apoyan la causa palestina, y dirigentes palestinos ya se han mostrado contrarios a los secuestros de mujeres y niños por la imagen que pueden crear y las adhesiones que les pueden restar.