”Sale una foto y y con saña lo atacan. Esa es un cobardía”, dijo el presidente por los ataques contra su hijo menor.
El presidente Andrés Manuel López Obrador salió a defenderse de quienes aseguran que tiene un pacto con un grupo del narcotráfico y de paso pidió a sus adversarios que los ataques de sus adversarios se dirijan a él y no a su hijo.
En Acapulco, Guerrero, en la inauguración de Libramiento Poniente de Acapulco, primera etapa, el mandatario dijo que “ante las campañas negras vamos a salir ilesos” y aunque ya sólo faltan a su gobierno dos años y meses, hará “más y mejores cosas” en su gobierno.
“Dicen que tengo relación con (Joaquín Guzmán) El Chapo porque fue a supervisar de Badiguarato a Sonora una obra”, dijo el mandatario. Y recordó que en un evento la madre del narcotraficante mandó decir que quería hablar con él.
“Me bajé yo a recibir su escrito, a saludar, ¿y qué se me quita con eso? ¿Y cuáles son las pruebas? Ah, se bajó a saludarla”, criticó.
Y ”ayer mi pobre hijo, que lo amo, Jesús. Está excedido de peso, ya saben la edad de la adolescencia, ya saben cómo es. Sale una foto y y con saña lo atacan. Esa es un cobardía, ¡si el problema es conmigo, no con él! Si hasta en las verdaderas mafias se respeta a la familia”, expuso el presidente.