El balance de víctimas mortales como consecuencia de la colisión de un avión militar ruso modelo Su-34 contra un edificio residencial en la región de Yeisk, en el suroeste de Rusia, ascendió a 13, según el más reciente reporte de las autoridades.
“Los equipos de rescate han completado la remoción de escombros. Durante las operaciones de búsqueda y rescate, se encontraron los cuerpos de diez muertos. Por lo tanto, el número total de víctimas mortales es de 13 personas, incluidos tres niños. Además, 19 personas resultaron heridas como resultado del siniestro”, informó un portavoz del Ministerio de Sanidad.
Por otro lado, los rescatistas encontraron a 68 personas con vida. “Gracias a las acciones profesionales, competentes y rápidas de las unidades de bomberos y rescate, 68 personas fueron rescatadas durante la operación de búsqueda y rescate”, agregó el portavoz.
Al lugar de los hechos se trasladaron una veintena de ambulancias de los hospitales de Yeisk, Scherbinovskaya y Starominskaya y seis vehículos aéreos medicalizados, según la vicegobernadora de Krasnodar, Anna Minkova.
Además, se activaron ocho equipos quirúrgicos, cuatro traumatológicos y cinco de reanimación. También se habilitaron dos quirófanos en la maternidad y uno en las unidades de ginecología y de oncología.
En la noche del 17 de octubre, un caza colisionó en una zona residencial de Yeisk. El Ministerio de Defensa indicó que la causa del siniestro fue el fallo de uno de los motores de la aeronave al poco de despegar en un vuelo de entrenamiento. Estas mismas fuentes apuntaron que la tripulación logró eyectarse a tiempo.