La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo este lunes que recomienda a China hacer un seguimiento del exceso de mortalidad por COVID-19 para tener una idea más completa del impacto del aumento de casos en el gigante asiático.
China informó el sábado pasado que casi 60.000 personas con coronavirus habían muerto en sus hospitales desde que el país asiático abandonó su política cero-COVID el mes pasado, un gran salto respecto a las cifras que comunicó antes de enfrentarse a las críticas internacionales por sus datos sobre el impacto de la pandemia.
“La OMS recomienda el seguimiento del exceso de mortalidad, que nos proporciona una comprensión más completa del impacto del COVID-19″, indicó la agencia de la ONU a Reuters en un comunicado cuando se le preguntó por China.
“Esto es especialmente importante durante los periodos de repuntes, cuando el sistema sanitario está gravemente afectado”, agregó.
La OMS añadió que se ha fijado la fecha para otra reunión con funcionarios chinos después de que el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, hablara con Ma Xiaowei, director de la Comisión Nacional de Salud de China, el fin de semana, pero añadió que seguiría trabajando con China para proporcionar asesoramiento y apoyo.
Tras criticar a Beijing por no ser francos sobre la magnitud del brote, la OMS afirmó el sábado que las autoridades chinas le habían proporcionado información sobre muertes en hospitales y atención ambulatoria que permitía comprender mejor la situación.
Lawrence Gostin, profesor de Derecho en Georgetown, Washington, que sigue de cerca a la OMS, dijo que la decisión de China de revelar más datos se había debido a la “insistencia de la OMS”.
“Conseguir cifras de muertos más precisas es alentador”, afirmó. “Pero sería aún más importante obtener datos completos de la secuencia genética del virus circulante en China. Esa es la gran preocupación mundial”.
La Comisión Nacional Sanitaria de China anunció un total de 59.938 muertes relacionadas con el coronavirus entre el pasado 8 de diciembre, cuando las autoridades empezaron a relajar las restricciones que mantenían contra la pandemia, y el 12 de enero de este año.
Según funcionarios del organismo, la edad media de los fallecidos registrados en centros médicos fue de 80,3 años de edad, de acuerdo a lo consignado por el diario Global Times.
Asimismo, el 90,1% de los fallecidos tenían más de 65 años, y más del 90% sufrían enfermedades subyacentes, según la Comisión.
El organismo aclaró que realiza pruebas PCR para clasificar las muertes de los pacientes como relacionadas con el COVID-19, y que las causas de los fallecimientos por el virus fueron fallos respiratorios (5.503) o enfermedades subyacentes que empeoran tras desarrollar covid (54.435).
El organismo también aseguró este sábado que los casos graves de coronavirus en el actual brote propagado por el país alcanzaron su pico el pasado 5 de enero. Ese día hubo 128.000 casos graves, y que el pasado día 12 descendió a los 105.000 casos graves, según los funcionarios de la comisión.
La rápida propagación del virus en China en las últimas semanas ha sembrado dudas sobre la fiabilidad de las cifras oficiales, que hasta ahora solo habían informado de un puñado de fallecimientos recientes por la enfermedad pese a las numerosas escenas de alta presión hospitalaria.