El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió hoy un comunicado urgente ante la amenaza de un temporal de lluvias intensas y puntuales extraordinarias que se espera afecte a varios estados del oriente, sur y sureste de México. Este fenómeno está vinculado a la Depresión Tropical Once-E, que actualmente se localiza en el océano Pacífico y ha comenzado a desplazarse hacia las costas del país, desencadenando condiciones de alto riesgo en múltiples regiones.
De acuerdo con el SMN, los estados más afectados por este sistema meteorológico serán Veracruz, Oaxaca, Tabasco, Chiapas, Campeche y Yucatán. Se prevé que en algunas zonas las precipitaciones alcancen o superen los 250 mm, lo que incrementa significativamente la posibilidad de inundaciones repentinas, desbordamiento de ríos y arroyos, así como deslizamientos de tierra en áreas montañosas y rurales.
Impacto previsto y recomendaciones
Las autoridades han subrayado que los niveles de agua esperados son considerados extraordinarios, especialmente en regiones que ya están saturadas por las lluvias previas de la temporada. Esto ha llevado a que el Sistema Nacional de Protección Civil active planes de contingencia en coordinación con los gobiernos estatales y municipales. Las zonas más vulnerables podrían ver evacuaciones preventivas para garantizar la seguridad de la población.
Protección Civil ha emitido una serie de recomendaciones para quienes viven en áreas susceptibles de inundaciones o deslizamientos, incluyendo tener preparados suministros de emergencia, evitar cruzar cuerpos de agua desbordados y no transitar por caminos de montaña que puedan verse comprometidos por deslaves. Igualmente, han sugerido a los automovilistas que eviten viajar en carreteras que cruzan regiones con alto riesgo de anegamientos, ya que las corrientes de agua podrían arrastrar vehículos.
Por otro lado, los puertos de la región han sido cerrados preventivamente ante la posible intensificación de los vientos y la formación de oleaje elevado, medidas especialmente relevantes para las actividades pesqueras y comerciales.
Monitoreo constante y posible intensificación
El SMN ha destacado que, aunque la Depresión Tropical Once-E aún no ha alcanzado el nivel de tormenta tropical o huracán, existe la posibilidad de que en las próximas 48 horas se intensifique conforme avance hacia tierra firme, lo que podría agravar aún más las condiciones meteorológicas en las zonas afectadas. El monitoreo es constante, y se espera que las actualizaciones más críticas se den durante la noche de hoy y la mañana del jueves.
Este temporal se suma a una temporada de ciclones tropicales que ha sido inusualmente activa en el Pacífico, con varios fenómenos importantes que han provocado inundaciones y daños significativos en diferentes partes del país. Las autoridades meteorológicas han señalado que el cambio climático está influyendo en la intensidad y frecuencia de estos sistemas, por lo que piden a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y no subestimar las advertencias emitidas.
Acciones y coordinación de las autoridades
En respuesta a la amenaza inminente, las secretarías de gobierno, junto con las fuerzas de seguridad y emergencias, han establecido centros de comando y coordinación en las capitales estatales para facilitar la rápida respuesta en caso de emergencias mayores. Se han habilitado albergues temporales en las áreas más afectadas, y se recomienda a la población mantenerse atenta a las instrucciones de evacuación, en caso de ser necesario.
Adicionalmente, los servicios de salud están preparados para atender posibles contingencias, y se han destinado recursos médicos y materiales a las zonas más remotas y vulnerables. Las brigadas de rescate y asistencia se encuentran en estado de alerta para actuar inmediatamente en cualquier situación de riesgo que se presente.
El SMN reiteró su llamado a seguir las indicaciones de las autoridades locales y nacionales, y advirtió que los efectos de la Depresión Tropical Once-E podrían prolongarse varios días, dependiendo de su evolución y su interacción con otros sistemas meteorológicos en la región.
Este es un momento clave para la prevención y la preparación ante posibles desastres naturales. Las autoridades y los expertos hacen un llamado a la calma, pero subrayan la importancia de tomar todas las precauciones necesarias para evitar pérdidas humanas y daños mayores a la infraestructura.