La mayoría de los diputados del partido Morena votaron a favor de una medida crucial para la seguridad en México: la adhesión de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Esta decisión marca un cambio significativo en el manejo de la seguridad pública en el país y ha generado tanto apoyo como críticas de diversas fuerzas políticas y actores sociales.
La iniciativa fue aprobada con una amplia mayoría en el Congreso, con 362 votos; lo que refleja el respaldo del partido gobernante hacia una estrategia más centralizada y militarizada en la lucha contra el crimen organizado. De acuerdo con los legisladores que apoyan la medida, la adhesión de la Guardia Nacional a la Sedena busca consolidar y fortalecer las capacidades operativas de la corporación, garantizando mayor disciplina y profesionalización en sus filas.
Posturas a favor y en contra
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha defendido la integración de la Guardia Nacional a la Sedena desde que fue anunciada, argumentando que la estructura militar ofrece una mayor garantía de eficacia y control en las operaciones de seguridad. Asimismo, se ha comprometido a que las labores de la Guardia Nacional mantendrán un enfoque en la protección de los derechos humanos.
Por otro lado, los partidos de oposición y diversas organizaciones civiles han expresado su preocupación por lo que consideran un riesgo para el control civil sobre las fuerzas de seguridad. Señalan que esta decisión podría implicar una militarización de la seguridad pública, debilitando los mecanismos civiles de supervisión y limitando la transparencia en el uso de la fuerza.
Un debate de largo plazo
La discusión sobre el papel de las Fuerzas Armadas en la seguridad pública no es nueva en México, pero esta decisión podría sentar un precedente importante para el futuro del país. A medida que las reformas avanzan, el debate se centra en encontrar un equilibrio entre garantizar la seguridad de los ciudadanos y preservar los principios democráticos que rigen las instituciones públicas.
El siguiente paso será observar cómo se implementa esta reforma en los meses y años por venir, y qué impacto real tendrá en el combate a la violencia y la inseguridad que aqueja a diversas regiones del país.
