Red Bull incorpora ideas de Mercedes en su nuevo monoplaza RB20.
De hecho, se trata de un movimiento que ha sido considerado por algunos como la forma definitiva de irritar a su rival, demostrando que cree que puede hacer funcionar diseños que su competidor no pudo.
Y a juzgar por lo mostrado por el RB20 en las pruebas de la semana pasada en Bahréin, todo indica que la escudería campeona del mundo ya le ha sacado mucho rendimiento.
Pero en lugar de seguir el camino de Mercedes para demostrar algo, la realidad es que Red Bull se resistió en un principio a aceptar las ideas previas de su rival para el cárter del motor y las entradas laterales.
Como ha explicado su director técnico, Pierre Waché, hay aspectos emocionales en juego cuando se trata de copiar ideas de otros equipos por encima de algo que has creado tú mismo.
Preguntado por si veía cierta ironía en que Red Bull adoptara las ideas de Mercedes, Waché ha declarado: «No lo veo así, lo veo más bien de otra manera».
«Intentas no ser emocional (con las decisiones de diseño), ya que la primera reacción es: ‘ah, es mejor tener tus propias ideas'».
«Pero llega un momento en que tienes que dar un paso atrás y decir: ‘¿el cronómetro y nuestro sistema dicen qué es mejor?’. Así que pruebas cosas y te quedas con lo que es mejor».
«Como ser humano, dices: ‘Preferiría hacer mis cosas’. Pero es peligroso porque tienes que seguir tu criterio, y si el criterio es ‘qué es mejor’, nos decantamos por lo que es mejor».
«Y tampoco es exactamente lo mismo para ser justos… es mucho mejor».
Waché ha explicado que la idea de adoptar una renovación tan radical de su coche para esta temporada se debió al hecho de que el equipo sentía que había comenzado a alcanzar una meseta de rendimiento con su dominante RB19.
Consciente de que sus rivales se acercaron a lo largo de la temporada 2023, Red Bull pensó que la única forma de dar un salto lo suficientemente grande era hacer algo muy diferente.
A la pregunta de qué motivó la decisión, respondió: «Se basó en la simulación y en los números».
«Sabes que tienes que mejorar bastante porque los demás volverán, y sabes que tu concepto está más o menos en la meseta de lo que puedes conseguir con él».
«Bueno, quizá no la meseta, porque otros encontrarán más, pero si quieres un ritmo de desarrollo diferente, tienes que apostar un poco más y arriesgar más. Así que tomamos esta decisión de asumir más riesgo bastante pronto».
«Es una evolución de cómo desarrollamos el coche, pero fue claramente un empujón para darnos la libertad de hacer un gran cambio en la estrategia en general».
Aunque está claro que Red Bull corría riesgos al no apostar por una evolución del concepto del RB19 que estaba por delante de la competencia, Waché tiene muy claro que no había ningún elemento que le hiciera jugársela con lo que ha hecho para este año.
«No apostamos: simplemente nos arriesgamos. Es diferente», afirma.
«No haces las cosas basándote en lo que no sabes. Dices, quiero ir en esta dirección, ¿qué puedo hacer para conseguirlo? ¿Qué tengo que hacer? Y la solución viene sola».
«No apuestas. En lugar de eso dices que si hago eso (el cambio), es más arriesgado que si lo mantengo. Después dices, ‘bien, minimizamos el riesgo estudiando más y más y más’. Y para ser sincero, los del área de aerodinámica han hecho un trabajo muy, muy bueno al respecto».