En el Congreso de Estados Unidos vuelve a retomar el tema de equiparar a los narcos como terroristas, a raíz del asesinato de los dos estadounidenses en Tamaulipas.
Después del asesinato de los estadounidenses en Tamaulipas, el Congreso de Estados Unidos retoma el tema de considerar a los narcos mexicanos como terroristas para poder atacarlos en territorio mexicano.
Los Republicanos han estado ejerciendo presión para endurecer las policías hacia México por el tráfico de fentanilo, que suma cifras record de muertes por sobre dosis en Estados Unidos. Pero a raíz del secuestro y asesinato de los estadounidenses en Tamaulipas, la presión es constante e incesante.
Los Republicanos quieren sumar a la lista de terroristas, de los cuales se encuentra el estado islámico, al Cartel de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG) y al del Golfo, entre otros, porque «han aterrorizado a los estadounidenses durante décadas», aseguran.
Especialistas aseguran que se ha demostrado que un enfoque tan agresivo a los narcos, además de disminuir la violencia, la ha aumentado, al fraccionarlos y crear células más pequeñas, que son generadores de violencia.