En México ya se detectaron cuatro casos de la subvariante de Covid-19 conocida como la “variante pesadilla”.
Se trata de un sublinaje de ómicron, identificado con las iniciales XBB.
Los casos corresponden a pruebas que fueron tomadas por el Laboratorio Salud Digna y luego verificados por el Instituto Nacional de Medicina Genómica.
Los casos fueron reportados al sistema Gisaid, que reúne información genómica de virus como el Covid-19 y la influenza, entre otros.
Estos son los datos que se conocen sobre las personas contagiadas, según la revisión de Aristegui Noticias:
noviembre; vive en el Estado de México.
-Una mujer de 12 años, residente en el Estado de México, que se hizo prueba de laboratorio el 16 de noviembre.
-Una mujer de 32 años, que se hizo prueba el 16 de noviembre; también vive en Edomex.
-Una mujer de 65 años, que vive en Ciudad de México, con prueba de laboratorio el 16 de noviembre.
Un reporte de The New York Times dice: Algunos informes han llegado a llamar a la XBB la “variante pesadilla”, a pesar de que el número de casos e ingresos hospitalarios asociados a ella ya había descendido de manera significativa para el 29 de octubre.
La Organización Mundial de la Salud publicó un aviso sobre las implicaciones para la salud pública del aumento de algunas variantes de Omicron, específicamente XBB y sus sublinajes.
La nota técnica dice:
XBB es un recombinante de los sublinajes BA.2.10.1 y BA.2.75.
A partir de la semana epidemiológica 40 (3 al 9 de octubre), XBB tiene una prevalencia global de 1,3% y se ha detectado en 35 países.
El TAG-VE discutió los datos disponibles sobre la ventaja de crecimiento de este sublinaje y algunas pruebas preliminares sobre la gravedad clínica y el riesgo de reinfección de Singapur e India, así como aportes de otros países.
Ha habido un amplio aumento en la prevalencia de XBB en la vigilancia genómica regional, pero aún no se ha asociado consistentemente con un aumento de nuevas infecciones.
Si bien se necesitan más estudios, los datos actuales no sugieren que existan diferencias sustanciales en la gravedad de la enfermedad para las infecciones por XBB.
Sin embargo, hay evidencia preliminar que apunta a un mayor riesgo de reinfección, en comparación con otros sublinajes circulantes de Omicron.
Los casos de reinfección se limitaron principalmente a aquellos con infección inicial en el período anterior a Omicron.
Hasta el momento, no hay datos que respalden el escape de las respuestas inmunitarias recientes inducidas por otros linajes de Omicron.
Si el aumento del escape inmunitario de XBB es suficiente para impulsar nuevas oleadas de infección parece depender del panorama inmunitario regional afectado por el tamaño y el momento de las oleadas anteriores de Omicron, así como de la cobertura de vacunación contra la COVID-19.