Uno de los subgobernadores del Banco de México (Banxico), Jonathan Heath, opinó que la tasa clave de interés debe seguir subiendo para poder enfrentar el complejo problema inflacionario y consideró que aún no están dadas las condiciones para que la política monetaria de nuestro país se desacople con la Reserva Federal de Estados Unidos.
Banxico ha incrementado la tasa de referencia en 600 puntos base, a un máximo histórico del 10%, como parte de un ciclo de alzas que inició en junio de 2021 en medio de una inflación qué alcanzó en agosto y septiembre un récord en más de dos décadas.
“Yo creo que todavía necesitamos seguir incrementando las tasas y pues eso lo dijimos en nuestro anuncio de política monetaria que dimos a conocer el pasado 10 de noviembre”, afirmó en un podcast de Banorte al estimar que la tasa real ex-ante, está en alrededor del 4.7% que consideró necesaria y que debe ser restrictiva para enfriar la inflación. Dicha tasa de interés se refiere al retorno real esperado de una inversión, descontando la inflación esperada.
Heath previó que la inflación subyacente seguirá subiendo a alrededor del 8.6% u 8.7% en noviembre y alcanzará la cima entre ese mes y el de diciembre, por lo que luego podría iniciar una trayectoria a la baja que calificó como prolongada, difícil y frágil.
“Si no hay choques no anticipados de aquí al cierre del 2023, yo creo que sí es viable la trayectoria a la baja, ya por fin en la inflación subyacente y podríamos estar ligeramente por debajo de niveles de 4% ya para fines del año entrante”, aseveró.
Heath añadió que la prioridad para la economía mexicana debe ser reducir la inflación antes que enfocarse en el crecimiento.
Heath dijo que si en el corto plazo Banxico empieza a subir la tasa menos que la Fed y comienza a disminuir el diferencial podría haber consecuencias adversas para el peso mexicano.
“Yo creo que pudiera tener efectos negativos, pudiéramos ver mucha más volatilidad, inclusive pudiéramos ver que el tipo de cambio o el peso mexicano se empieza a depreciar algo. En el corto plazo no creo que es algo que nos conviene”, sostuvo.
El pasado 11 de noviembre, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que le gustaría que el Banco de México cuide el crecimiento económico además de la inflación.
El mandatario dijo que su gobierno respeta las decisiones de Banxico, al que reconoció como un organismo autónomo.
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“A veces nos gustaría que no sólo se preocuparan del control de inflación sino que también equilibren cuidando el crecimiento y se van más siempre por el combate a la inflación y no al fomento al crecimiento”, dijo.
La inflación interanual general de México se ubicó en un 8.28% en la segunda quincena de octubre tras tocar niveles del 8.77% en la segunda mitad de agosto.
Respecto a los futuros pasos de Banxico frente a los de la Reserva Federal de Estados Unidos, el funcionario dijo que “no estamos todavía listos para un desacople”.
“Creo yo que es muy importante que en el corto plazo sigamos moviéndonos más o menos en línea con la Fed y buscar más adelante, pero ya cuando realmente veamos que está vencido este problema de inflación en ambos países, ya cada quien tomará decisiones que pudieran implicar un desacople”, agregó.
“Pero no lo veo a la vuelta de la esquina, para nada”.
