Por su parte, el Departamento de Justicia de Estados Unidos reveló que presentó cargos contra 13 supuestos agentes de inteligencia chinos.
Christopher A. Wray, director del FBI, informó sobre ciberataques a ciudadanos y empresas en los que estarían implicadas autoridades del gobierno chino.
En conferencia de prensa desde el Departamento de Justicia, el director aseguró que en repetidas ocasiones informó de las prácticas desleales de china respecto a la legislación internacional.
«El FBI ha presentado alertas contra la manera como China ataca a empresas de todo tipo de industrias. Y esto lo hace contra empresas de EU y del mundo entero. Ahora el mundo ya está en alerta como no había estado hace 5 años», dijo Christopher Wray.
Asimismo, señaló a Beijing por sentirse «intocable» ante los señalamientos, sin embargo, aseguro que gracias al trabajo realizado se está exponiendo cada vez más información sobre sus ciberataques.
«Beijing puede sentirse intocable al imperio de la ley pero se equivoca, estamos desentrañando su conducta criminal que ataca nuestros valores», dijo el FBI.
Acusan de espionaje a 13 agentes chinos
Por su parte, el Departamento de Justicia de Estados Unidos reveló que presentó cargos contra 13 funcionarios y supuestos agentes de inteligencia chinos acusados de espiar y de cometer abusos en nombre del Gobierno de Pekín en territorio estadounidense.
El fiscal general de EU, Merrick Garland dio a conocer que entre los imputados hay dos supuestos espías chinos a los que EU atribuye haber interferido en una investigación federal en Nueva York contra una compañía de telecomunicaciones, que las autoridades no identificaron, pero que medios de comunicación estadounidenses indicaron que se trata de Huawei.
Garland dijo que, de acuerdo a los escritos de acusación, en 2019 esos dos imputados pidieron a un agente infiltrado del FBI que robara información confidencial sobre el caso abierto en EU contra una compañía de telecomunicaciones basada en China.
Los dos presuntos espías chinos pensaban que habían logrado captar a un funcionario estadounidense como activo, cuando en realidad lo que estaban haciendo era reclutar a un doble agente del FBI al servicio de EU.
Garland agregó que los supuestos espías chinos pagaron un soborno al doble agente para obtener datos no públicos, como archivos de la oficina del fiscal del Distrito Este de Nueva York, para acceder a la estrategia de la Fiscalía e información confidencial sobre los testigos en el caso contra la firma china de telecomunicaciones.
Sin embargo, el agente del FBI les proporcionó documentos que aparentemente eran verdaderos, cuando en realidad habían sido preparados por el Gobierno de EU para acusarlos de espionaje.
